PALPITACIONES

domingo, 15 de abril de 2018

UN TROZO DE PEZ ASADO

Lo comió como signo de su hambre de comunión con nosotros. Su humanidad no ha desaparecido del Resucitado. No se entendería la resurrección sin su ser hombre, sin su fragilidad, sin la cruz que no queda pospuesta sino incorporada al misterio de la vida plena.

No hay comentarios:

Publicar un comentario