Bendito sea el Espíritu Santo Paráclito. Es una expresión conocida y repetida por muchos cristianos, ligada a la adoración del Santísimo Sacramento. Es una de esas invocaciones de reparación del culto eucarístico fuera de la Eucaristía. En estos días escuchamos esta palabra en los evangelios de la Misa de cada día. Hasta Jesús se ve a si mismo como tal. El nos enviará otro Paráclito. Bendito sea. Que El nos ayude a crecer en el conocimiento de Dios y en la acción comprometida con los indefensos y no atendidos que nos encontramos todos los días.
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