Desde Nazaret salías un día
con una firme decisión. Bajas al río.
Te sabes Hijo en el silencio del desierto.
Rumor de aguas. Ellas aguardan
Rumor de aguas. Ellas aguardan
tu cuerpo, tu cabeza, tus pies de mensajero.
No te aguarda Juan, que se calla
y se asombra del que bautizará
en Espíritu, bañándose con agua.
y se asombra del que bautizará
en Espíritu, bañándose con agua.
No hay comentarios:
Publicar un comentario